Pero tienes que sacar fuerzas y prepararte lo antes posible porque tus amigas te están esperando.
El problema se agrava si todas estáis en la misma habitación. Entre que alguna se tumba en la cama, la otra empieza a contar historietas y otra se engancha al móvil, el peligro de que la salida nocturna se convierta en una fiesta de pijamas aumenta peligrosamente.
Para estas ocasiones tengo la solución perfecta:
¡Ponte el pijama!
incluso puedes salir con unos slippers y ya tienes el look completito
Nota mental: Irene, al volver al hotel de juerga no saltes en la cama si no quieres que te aporreen la puerta por la mañana mientras |
Esto de salir en pijama no me lo he inventado yo, ya lo veíamos en las pasarelas del 2011, en la calle y en las celebrity.
Mi versión es un poco light. Sólo llevo la camisa de un pijama de seda de mi madre. Pero cumple la misma función. Si salimos de fiesta, vamos estupendas. Y si nos quedamos cotiyeahndo, ya tenemos el pijama puesto para meternos a la cama.
Además, si sales de fiesta, a la vuelta sólo tienes que tirar los zapatos, dejar el bolso donde caiga y a soñar con el macizo que has conocido en el último bar. Qué curioso, esto siempre pasa al final de la noche, ¿será que quedan los más desesperados? Pero no importa, los sueños sueños son. Así que...
¡DULCES SUEÑOS!
Eso sí, ¡primero desmaquíllate!
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