La Rubias no Somos Tontas

Este es mi cuarto post y ya me he quedado sin ideas... sé que esto no es un principio muy prometedor pero mucho me temo que mis musas me han abandonado... ¿creéis que debía haberlas invitado a cenar, o comprarles algún regalo caro de esos que tanto nos gustan? esas cosas típicas que te regala tu novio cuando la ha cagado. Sí, ya sabéis, diamantes, un cochazo, los Jimmy Choo para los que llevas ahorrando toda tu vida (y que nunca te comprarás)... No, yo tampoco he recibido nada de eso pero, qué quieres que te diga, tampoco me hace falta! (Muy bien Irene, haciendo caso al psicólogo: "no necesitas esas cosas materiales para ser feliz." No los necesito, no los necesito...).
Pero, ¡Que no cunda el pánico! no os voy a abandonar cachorritos míos. Me gusta terminar las cosas que empiezo, no me gusta eso de dejarlo a medias -esta frase no tiene segundas intenciones-. No tengo muy claro cuándo se acaba de escribir un blog pero yo voy a seguir adelante, con las mismas ganas e ilusión que en los comienzos (hace una semana). 

De momento os dejo con unas fotos de una rubia buenorra que, aunque no tenga nada que decir, esto siempre vende mucho (sino que se lo digan a Patricia Conde).
 

  

de pequeña odiaba los lazos ¡qué peleas con mi madre! pero últimamente me ha dado por ponerme como un árbol de navidad. No os molestéis, ya cumplo yo vuestros deseos de estrangularme: